Cinco formas de las que la impresión 3D puede ayudar a tu clínica dental a recuperarse

En todo el mundo, los negocios que interrumpieron su actividad para proteger a sus empleados y a sus clientes de la pandemia de COVID-19 están empezando a abrir sus puertas de nuevo. El sector de la odontología se ha visto especialmente afectado por la pandemia, los cierres y las recesión económica derivada de ellos. Volver al trabajo también conlleva riesgos: los dentistas, los higienistas dentales y los pacientes se enfrentan a un riesgo especialmente elevado de transmitir o contraer una enfermedad respiratoria.

Profesionales de todo el sector están elaborando soluciones creativas que cualquiera que disponga de una impresora 3D puede poner en práctica. Lee cómo la tecnología digital puede mantenerte a ti y a tu personal a salvo en la "nueva normalidad".

1. Fabrica EPI in situ

Cuando la clínica dental del Dr. Naren Rajan en Nueva Jersey cerró temporalmente en marzo de 2020, se llevó su impresora 3D Form 2 a su hogar, desde donde ha estado imprimiendo ajustadores de mascarillas personalizados para trabajadores de la odontología de todo el país. Indica a los receptores que utilicen el software gratuito de ajuste de mascarillas Bellus 3D, que usa un iPhone o iPad para realizar un escaneo 3D del rostro con el que se genera un archivo 3D de ajuste a medida. A continuación, dicho archivo se imprime.

Cuando los ajustadores de mascarillas están en manos de su personal o de otras personas, pueden utilizarlos para mejorar el sellado periférico de las mascarillas quirúrgicas, manteniendo a salvo a los dentistas incluso cuando tiene un contacto cercano con los pacientes.

Al principio, el Dr. Rajan pidió a sus seguidores en redes sociales que donaran Grey Resin de Formlabs para que pudiera proporcionar ajustadores de mascarillas de forma gratuita. Después de usar la resina donada para imprimir cientos de ajustadores, pasó a usar la Tough 2000 Resin, ya que según él, ofrece mejores propiedades mecánicas para un uso repetido. Ahora cobra una pequeña tarifa por cada ajustador para cubrir los costes de la impresión... y los de la mano de obra, ahora que su clínica está volviendo a abrirse poco a poco.

El Dr. Rajan fue uno de los primeros en adoptar la odontología digital y da ponencias sobre las ventajas clínicas de los procesos de trabajo digitales. En situaciones normales, cuando su Form 2 no está imprimiendo ajustadores de mascarillas, la usa para imprimir modelos y guías quirúrgicas.

"Quienes formamos parte de la comunidad de la odontología digital hemos estado en condiciones de dedicar nuestras capacidades muy rápidamente a empezar a imprimir EPI (equipos de protección individual)", dijo el Dr. Rajan. "Tener la capacidad de imprimir lo que necesite aquí mismo es muy emocionante".

Formlabs ha seleccionado cuidadosamente varias piezas de dispositivos no médicos procedentes de la comunidad que pueden ayudar a combatir la COVID-19, incluido el ajustador de mascarillas de Bellus3D. Empieza a imprimir hoy mismo con diseños del Catálogo de piezas de la comunidad.

2. Sustituye los dispositivos perdidos o rotos sin necesidad de visitas

Durante un período en el que el estado de Tennessee había limitado las visitas de odontólogos únicamente a casos urgentes, el Dr. Jay Burton recibió una llamada de un paciente que había perdido sus retenedores. Ya que había digitalizado el caso del paciente con todos los pasos registrados, el Dr. Burton y su equipo fabricaron un nuevo juego de retenedores sin ver al paciente en persona.

"Simplemente imprimimos los modelos y fabricamos los retenedores. Después, los enviamos por correo y el paciente los recibió el día siguiente", dijo el Dr. Burton. "Ahora no tengo que preocuparme de volver a tratar a un paciente mientras solo podemos atender urgencias".

Las ventajas de las impresiones digitales y la impresión 3D siguen siendo válidas para los dispositivos nuevos: en los casos sencillos, los pacientes pueden ir a una simple comprobación de ajuste, con lo que se reduce el tiempo en la consulta y la probabilidad de transmisión de la enfermedad.

Aprende a fabricar alineadores y retenedores extraíbles con modelos impresos en 3D.

3. Toma menos impresiones manuales arriesgadas

Con la creciente adopción del escaneo intraoral y la flexibilidad de la transmisión de datos con la tecnología, las impresiones digitales se están convirtiendo en la nueva referencia tanto para clínicas como para laboratorios dentales. El intercambio digital de datos es más veloz y menos caro. Y podría ser más seguro.

Un artículo publicado en 2019 en la revista BioMed Research International llegó a la conclusión de que las impresiones manuales con frecuencia transmiten microbios infecciosos. Por otro lado, con las impresiones digitales, el riesgo es considerablemente menor. En otras palabras, el traspaso de datos únicamente digital, sea a un laboratorio externo o a un técnico interno, puede reducir los posibles riesgos.

Además de hacer menos probable la transmisión de las enfermedades que con las impresiones manuales, las impresiones digitales son más rápidas, suponen menos tiempo en la consulta y son más fiables, con lo que desembocan en resultados clínicos más precisos.

Para los odontólogos que vean esto y decidan usar con más frecuencia las impresiones digitales: la impresión 3D en la propia clínica es un paso sencillo para realizar la transición a un proceso de trabajo digital.

4. Dedica menos tiempo al mantenimiento del equipo

Las impresoras 3D de escritorio requieren menos mantenimiento que otras herramientas de fabricación asistida por ordenador (CAM). Las fresadoras y las impresoras 3D industriales tienen un proceso complejo para cambiar de material, las reparaciones pueden requerir una visita de un técnico y las actualizaciones de software suelen cobrarse con una tarifa adicional.

Por otra parte, las impresoras 3D para odontología como la Form 3B son fiables y no necesitan un mantenimiento continuo más allá de una simple limpieza a medida que se usan. En el caso de que la impresora sí requiera una reparación, la mayoría de las operaciones se pueden realizar sin herramientas ni habilidades especializadas. Poder reparar el equipo uno mismo significa que habrá menos visitas del exterior a la consulta, por lo que los odontólogos y su personal pueden centrarse en atender a los pacientes y en su propia seguridad.

Además, se tarda solo unos segundos en cambiar de material y las actualizaciones siempre son gratuitas. El Dr. Rick Ferguson ha usado varias impresoras 3D en su consulta y ha llegado a la conclusión de que "la Form 3B es la impresora más intuitiva y fiable que hemos tenido hasta ahora".

5. Optimiza tu tiempo y tus recursos

En plena recesión económica, a las empresas de todos los sectores les preocupa su balance. Las clínicas dentales, que suelen tener menos de 10 empleados, no son una excepción.

Para las clínicas que ya han invertido en un escáner intraoral, una impresora 3D de escritorio es una manera fácil de llevar la producción a sus instalaciones, con lo que ahorran dinero y tiempo de entrega en casos sencillos que requieren modelosguías quirúrgicasguardas oclusales e incluso prótesis dentales digitales.

Ponte en contacto con nuestro departamento de ventas para hablar de cómo una impresora
3D puede ayudar a mantener a salvo a tu personal, reducir el número y la frecuencia de las visitas a los pacientes y ahorrar dinero en tu propia clínica.